Abbie Dartlett, temerosa de que su novio se desmadrara más de la cuenta en sus vacaciones en Ibiza, ideó un plan infalible: hacerle lucir durante todos los días una camiseta con imágenes de la pareja.
Por si no fuera suficiente llevar las fotografías estampadas en la camiseta, las acompañaba una frase que ponía: “Amo a mi novia Abbie y odio a todas las chicas de Ibiza, así que por favor, no os acerquéis”.
Y por si esto tampoco fuera suficiente, la joven le exigió al joven que le mandara cada día una foto mostrando que llevaba la camiseta.
Abbie comentó a los medios que todo era una broma porque ella confía mucho en Leon Connlly: “Nunca imaginé que un juego de pareja iba a tener una repercusión mundial”.
La joven ha querido dejar muy claro que todo era una ocurrencia. “Nos conocimos cuando éramos muy jóvenes y hemos estados juntos desde entonces. Confío en él completamente, así que no me importa que se vaya con sus amigos de vacaciones, porque yo también lo he hecho”, añadió.
Quizás la próxima vez tenga más cuidado con las cosas que publica en las redes sociales si no quiere ser víctima de los usuarios.